Ser Casa Familiar de restauración integral. Desarrollar discípulos que conozcan a Dios, le amen y le obedezcan. Que amen al prójimo y por ende le sirvan. Desarrollar la unidad familiar saludable. Sembrar en las generaciones que se están levantando para que logren su propósito en Dios. Ser una entidad de capacitación y desarrollo de líderes tanto locales como internacionales.
Sembrar en las iglesias locales los recursos espirituales, financieros y administrativos que Dios ha confiado para enriquecimiento del cuerpo de Cristo y extensión de su Reino. Desarrollar una Iglesia con visión evangelística y ser así una entidad de cambio para nuestra comunidad y nación.
Ser una voz profética. Visión misionera mundial enviando, yendo y apoyando tanto a misioneros locales como internacionales. (Proverbios 29:18; Habacuc 2:1-3)